SpikeL Comunidad
Hola, bienvenido a SpikeL Foro.

Si eres nuevo, deves registrarte.

Si ya tienes una cuenta, deves ingresar.

¡Muchas gracias!

PD: Si te has registrado pero no puedes logear tienes que activar tu cuenta desde tu e-mail.


Unirse al foro, es rápido y fácil

SpikeL Comunidad
Hola, bienvenido a SpikeL Foro.

Si eres nuevo, deves registrarte.

Si ya tienes una cuenta, deves ingresar.

¡Muchas gracias!

PD: Si te has registrado pero no puedes logear tienes que activar tu cuenta desde tu e-mail.
SpikeL Comunidad
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.

A la Deriva.

2 participantes

Ir abajo

Tick A la Deriva.

Mensaje por Eurocase Mar Mar 22, 2011 7:28 pm

Por Internet se vuelve complicado encontrar un cuento completo ¿O me equivoco?. Y el rincón del vago no es para nada fiable..
Les dejo el cuento COMPLETO.


A la deriva


"El hombre pisó algo blanduzco, y en seguida sintió la mordedura en el pie. Saltó adelante, y al volverse con un juramento vio una yararacusú que, arrollada sobre si misma, esperaba otro ataque.
El hombre echó una veloz ojeada a su pie, donde dos gotitas de sangre engrosaban dificultosamente, y sacó el machete de la cintura.
La víbora vio la amenaza, y hundió más la cabeza en el centro mismo de su espiral; pero el machete cayó de lomo, dislocándole las vertebras.
El hombre se bajó hasta la mordedura, quitó las gotitas de sangre, y durante un instante contempló. Un dolor agudo nacía de los dos puntitos violetas, y comenzaba a invadir todo el pie.
Apresuradamente se ligó el tobillo con su pañuelo, y siguió por la picada hacia su rancho.
El dolor en el pie aumentaba, con sensación de tirante abultamiento, y de pronto el hombre sintió dos o tres fulgurantes puntadas que como relámpago habían irradiado desde la herida hasta la mitad de la pantorrilla. Movía la pierna con dificultad; una metálica sequedad de garganta, seguida de sed quemante, le arranco un nuevo juramento
Llegó por fin al rancho, y se echó de brazos sobre la rueda de un trapiche. Los dos puntitos violetas desaparecían ahora en la monstruosa hinchazón del pie entero. La piel parecía adelgazada y a punto de ceder, de tensa. El hombre quiso llamar a su mujer, y la voz se quebró en un ronco arrastre de garganta reseca. La sed lo devoraba
-¡Dorotea! -alcanzó a decir- ¡Dame caña!
Su mujer corrió con un vaso lleno, que el hombre sorbió en tres tragos. Pero no había sentido gusto alguno.
-¡Te pedí caña, no agua! -rugió de nuevo-. ¡Dame caña!.
-¡Pero es caña, Paulino! -protestó la mujer espantada.
-¡No, me diste agua! ¡Quiero caña, te digo!.
La mujer corrió otra vez volviendo con la damajuana. El hombre tragó uno tras otro, dos vasos, pero no sintió nada en la garganta.
-Bueno; esto se pone feo... -murmuró entonces, mirando su pie lívido y ya con lustre gangrenoso. Sobre la honda ligadura del pañuelo, la carne desbordaba como una monstruosa morcilla.
Los dolores fulgurantes se sucedían en continuos relámpagos y, llegaban ahora a la ingle.
La atroz sequedad de garganta, que el aliento parecía caldear más, aumentaba a la par. Cuando pretendió incorporarse, un fulminante vómito lo mantuvo medio minuto con la frente apoyada en la rueda de palo.
Pero el hombre no quería morir, y descendiendo hasta la costa subió a su canoa. Se sentó en la popa, y comenzó a palear hasta el centro del Paraná. Allí la corriente del río, que en las inmediaciones del Iguazú corre seis millas, lo llevaría antes de cinco horas a Tacurú-Pucú.
El hombre, con sombría energía, pudo efectivamente llegar hasta el medio del río; pero allí sus manos dormidas, dejaron caer la pala en la canoa y tras un nuevo vómito, -de sangre esta vez-,dirigió una mirada al sol que ya trasponía el monte.
La pierna entera, hasta medio muslo, era ya un bloque deforme y durisimo que reventaba la ropa. El hombre cortó la ligadura y abrió el pantalón con su cuchillo: el bajo vientre desbordó hinchado, con grandes manchas lívidas y terriblemente doloroso. El hombre pensó que no podría jamás llegar él solo a Tacurú-Pucú, y se decidió a pedir ayuda a su compadre Alves, aunque hacia mucho tiempo que estaban disgustados.
La corriente del río se precipitaba ahora hacia la costa brasileña, y el hombre pudo fácilmente atracar. Se arrastro por la picada en cuesta arriba, pero a los veinte metros, exhausto, quedo tendido de pecho.
-¡Alves! -gritó con cuanta fuerza pudo; y prestó oído en vano.
-¡Compadre Alves! ¡No me niegue este favor! -clamó de nuevo, alzando la cabeza del suelo. En el silencio de la selva, no se oyó ni un solo rumor. El hombre tuvo aún valor para llegar hasta su canoa, ya la corriente, cogiéndola de nuevo, la llevó velozmente a la deriva.
El Paraná corre allí en el fondo de una inmensa hoya cuyas paredes, altas de cien metros, encajonan fúnebremente al río. Desde las orillas bordeadas de negros bloques de basalto, asciende el bosque, negro también. Adelante, a los costados, detrás, siempre la eterna muralla lúgubre, en cuyo fondo el río arremolinado se precipita en incesantes borbollones de agua fangosa. El paisaje es agresivo, sin embargo su belleza sombría y calma cobra una majestad única.
El sol había caído ya cuando el hombre, semitendido en el fondo de la canoa, tuvo un violento escalofrió. Y de pronto, con asombro, enderezó pesadamente la cabeza: se sentía mejor. la pierna dolía apenas, la sed disminuía, y su pecho, libre ya, se abría en lenta inspiración.
El veneno comenzaba a irse, no había duda. Se hallaba casi bien, y aunque no tenia fuerzas para mover la mano, contaba con la caída del roció para reponerse del todo. Calculó que antes de tres horas estaría en Tacurú-Pucú.
El bienestar avanzaba y con él una somnolencia llena de recuerdos. No sentía ya nada ni en el vientre. ¿Viviría aún su compadre Gaona en Tacurú-Pucú? Acaso viera también a su ex-patrón míster Dougald, y al recibidor del obraje.
¿Llegaría pronto? El cielo, al poniente, se abría ahora en pantalla de oro, y con el río se había coloreado también. Desde la costa paraguaya, ya entenebrecida, el monte dejaba caer sobre el río su frescura crepuscular, en penetrantes efluvios de azahar y miel silvestre. Una pareja de guacamayos cruzó muy alto y en silencio hacia el Paraguay.
Allá abajo, sobre el río de oro, la canoa derivaba velozmente girando a ratos sobre si misma, ante el borbollón de un remolino. El hombre que iba en ella se sentía cada vez mejor, y pensaba entretanto en el tiempo justo que había pasado sin ver a su ex-patrón Dougald. ¿Tres años? Tal vez no, no tanto. ¿Dos años y nueve meses? Acaso. ¿Ocho meses y medio? Eso si, seguramente.
De pronto sintió que estaba helado hasta el pecho. ¿Que sería? Y la respiración...
Al recibidor de maderas de míster Dougald, Lorenzo Cubilla, lo había conocido en Puerto Esperanza un viernes santo... ¿Viernes? Sí, o jueves...
El hombre estiró lentamente los dedos de la mano.
-Un jueves...
Y cesó de respirar.
Horacio Quiroga.

Eurocase
Eurocase
Moderador
Moderador

Medallas
A la Deriva. Prensa1A la Deriva. Moderador1A la Deriva. Ao1

Mensajes Mensajes : 528
Puntos Puntos : 49526
Reputación Reputación : 51
Fecha de inscripción Fecha de inscripción : 14/12/2010
País País : Argentina


Volver arriba Ir abajo

Tick Re: A la Deriva.

Mensaje por bAiLeRoChAa Miér Mar 23, 2011 10:45 pm

Altos cuentos tiene ese m re atrapo xD , si no me ekivoko es un autor al qe no le gusta trabajar y prefiere la plata facil ¿no?
bAiLeRoChAa
bAiLeRoChAa
Nivel 13
Nivel 13

Medallas
A la Deriva. Prensa1

Advertencias Advertencias : 1
Mensajes Mensajes : 184
Puntos Puntos : 48757
Reputación Reputación : 0
Fecha de inscripción Fecha de inscripción : 30/12/2010
País País : Argentina


Volver arriba Ir abajo

Tick Re: A la Deriva.

Mensaje por Eurocase Jue Mar 24, 2011 12:25 am

La verdad, ni idea..Razz

Yo solamente se que este cuento es muy leído en estos años.. y bueno, quizás les vendría bien, me morí transcribiendo letra por letra, ya que no lo busque por Internet, sino que lo copie de un libro de relatos que tengo yo.
Eurocase
Eurocase
Moderador
Moderador

Medallas
A la Deriva. Prensa1A la Deriva. Moderador1A la Deriva. Ao1

Mensajes Mensajes : 528
Puntos Puntos : 49526
Reputación Reputación : 51
Fecha de inscripción Fecha de inscripción : 14/12/2010
País País : Argentina


Volver arriba Ir abajo

Tick Re: A la Deriva.

Mensaje por bAiLeRoChAa Jue Mar 24, 2011 12:36 am

: O si tarde cmo mdia hora leerlo no me imagino copiarlo :1
bAiLeRoChAa
bAiLeRoChAa
Nivel 13
Nivel 13

Medallas
A la Deriva. Prensa1

Advertencias Advertencias : 1
Mensajes Mensajes : 184
Puntos Puntos : 48757
Reputación Reputación : 0
Fecha de inscripción Fecha de inscripción : 30/12/2010
País País : Argentina


Volver arriba Ir abajo

Tick Re: A la Deriva.

Mensaje por Contenido patrocinado


Contenido patrocinado


Volver arriba Ir abajo

Volver arriba


 
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.