Un amor, un detective, un destino

por Eurocase Miér Abr 13, 2011 8:28 pm

Me encantan sus relatos !

Un amor, un detective, un destino

Todo era demaciado extraño, ¿Por qué demonios me enamore de ella?.
Yo era un buen chico, un buen Agente, ¡Maldita sea!. ¿Por qué me habre fijado en ella?
Justamente en la hija del Mafioso al cual yo mismo debia atrapar ¿Por qué?
La vida puede ser muy cruel cuando se la propone. Ahora me encuentro entre la espada y la pared...
¿Qué hacer?, de ahi el dilema.

A pesar de esto, no puedo evitar sentir lo que siento, me da miedo pensar en los riesgos de este maldito sentimiento.
Se que puedo enfrentar cualquier tipo de criminales, soy un detective frio y experimentado. Pero no estoy entrenado para esto.
Estube varios dias pensando que hacer.. como actuar, pero decidi dejar mi mente en paz, y escuchar a mi frio corazon..

Días despues me declare, culpa de mi corazón, sin miedo a nada, sin embargo, jamas revele mi autoridad, sabia que si lo haría, seria hombre muerto.
Pasaron semanas, el miedo se iba, me adapte a las armas, y las miradas de los demas mafiosos... era un infiltrado ciego, ciego de amor..
Pero, aquel dia.. aquel maldito dia.. fue el que arruino todo, ¡¡incluso mi vida!!
Yo estaba en los alrededores de la mansión de los Mafiosos, cuando la placa, se me escapa del saco..
¡¡¡ y que mala pasada !!! ... la notaron apenas acaricio el suelo y no tuve mas remedio que correr.. los malditos mafiosos desenfundaron sus armas y comenzaron a disparar, sin compación, yo debil, no tenia mas opción que correr. No obstante las balas son mas rápidas. Mi cuerpo, esta completamente baleado..
Ahora.. me acerco a mi fin, mi alma se debilita a cada segundo, no tengo mas energias para hacer latir mi corazón.
Sin embargo intento seguir de pie.. pero la muerte es un destino cruel, e inevitable..

Dos Semanas después...

Ya he muerto, mi alma descansa en un mundo oscuro, y abandonado, donde lo unico que veo son imágenes y recuerdos de las personas que amo. De ves en cuando logro, por unos segundos, abrir los ojos a la realidad, donde encuentro otro mundo oscuro, rodeado de Tierra y Gusanos, completamente inmóvil. ¿Qué importa ser presidente, un vagabundo o incluso un detective...?, la muerte es igual para todos.. incluso para mi.

Fin.

Agustina M. Criscenti